Propaganda terrorista

El término “propaganda terrorista” hace referencia a los elementos comunicativos que emite una organización terrorista y que tiene como finalidades principales las de captar nuevos adeptos, ganar apoyos y simpatías entre la población, defender el uso de la violencia o desacreditar al adversario. Como propaganda terrorista caben multitud de formatos, ya sean vídeos, carteles en formato físico, panfletos, imágenes en Internet acompañadas de eslóganes, graffitis en las calles, etc.  Se caracteriza por emplear técnicas persuasivas y siempre orientada a influir en el receptor del mensaje provocando una respuesta psicológica, cognitiva y emocional que favorezca a los intereses de la organización terrorista.

Imagen propagandística del Estado Islámico difundida por Twitter y medios de comunicación, donde se pueden ver a miembros armados del ISIS, todo ello con una edición fotográfica y retoques bastante técnicos. Es un claro ejemplo del nivel cualitativo de la propaganda del Isis, así como la adaptación a las TIC que han desarrollado estas organizaciones.

La propaganda terrorista no deja de ser muy distinta a otros tipos de propagandas como puede ser la propaganda de guerra por ejemplo. Es una comunicación persuasiva en la que se encuentra un mensaje simple, generalmente con un carácter emocional y que trata de activar una respuesta en el receptor. La propaganda terrorista sí que dista en que los medios pueden variar, dado que al suponer un carácter ilícito al tener la intención de dar apoyo a un grupo criminal, no podrá tener la misma libertad de difusión que una Estatal por ejemplo. La propaganda por lo tanto buscará otros medios alternativos para difundir su mensaje, en forma de grafitis, foros y webs de internet, boletines y revistas clandestinas, redes sociales, cintas enviadas a medios de comunicación, etc. Pero sobre todo, en lo que se caracteriza la propaganda terrorista es en su finalidad: “El propósito del propagandista es hacer que un conjunto de personas olvide que otro conjunto de personas son humanas” (Aldous Huxley citado en Torres, M. 2009) y es precisamente esa la faceta más importante de la propaganda terrorista, el llegar a conseguir que sus seguidores y miembros dejen de ver como a personas de carne y hueso al “enemigo”.

Además de ésta, la  propaganda terrorista tiene varias finalidades, en primer lugar la de potenciar  la capacidad de actuación del grupo, ya sea mediante la captación y radicalización de más miembros para su causa, ya sea la de legitimar sus razones para la lucha, o bien para tratar de legitimar el uso de la violencia para alcanzar la finalidad del grupo.

Marsahll Mc Luham (1996), investigador del impacto de los medios de comunicación sobre la sociedad, dijo que sin la comunicación no habría terrorismo. A lo que se refiere Luham es que sin un público, un receptor del mensaje, no podría existir, ni tendría sentido, la existencia del terrorismo, pero tampoco si dispusiesen de los medios de comunicación para llegar a esos receptores.

La importancia de  esta propaganda se basa en que el terrorismo se sustenta en la interacción con su entorno, con los medios de comunicación, las instituciones, etc. pero sobre todo, su importancia radica en que la violencia terrorista se caracteriza en que tiene un alto componente comunicativo en el sentido de que su meta es alcanzar el poder político pero no mediante esa violencia limitada contra un objetivo concreto, sino mediante el valor simbólico de esa acción, “asustar a muchos matando solo a unos pocos. El miedo tiene aquí un efecto multiplicador de fuerza que permite a  la organización terrorista el suponer un gran problema a sus enemigos. Éstos llevan a cabo una enorme elaboración de propaganda y de comunicación pública, tanto manifiestos, cartas, elementos audiovisuales que les de la capacidad de retransmitir su doctrina, ideología, religión, visión de la realidad, amenazar, etc.” (Torres,M. 2006)

Cuanto mayor sea el público que pueda abarcar el grupo terrorista, mejor conseguirá su objetivo, que es trasladar su mensaje de la violencia. Es por ello, que en muchos casos sin querer, los medios de comunicación, los canales de televisión, periódicos, radio, etc. han sido indirectamente los cómplices de los terroristas convirtiéndose en los portavoces y megáfonos de la violencia que ejercían los terroristas, mostrando de primera mano las consecuencias y la destrucción, retransmitiendo en cada casa los comunicados de los grupos y difundiendo su mensaje.

 

 

La propaganda es uno de los objetivos primordiales de los grupos terroristas, dado que tiene una función principalmente comunicativa, y como ya he mencionado antes, la difusión de su mensaje es uno de los principales objetivos del grupo y sin él, el fracaso estaría asegurado. Además de difundir su mensaje, la propaganda tiene una serie de funciones generales o estratégicas (Paul Wilkinson 1997):

  1. Mantener la cohesión interna y acrecentar la moral y motivaciones del grupo: La propaganda en este sentido permite informar al terrorista y darle argumentos que puedan justificar su determinación por la causa terrorista. Esta información, es meticulosamente seleccionada, elaborada, filtrada y difundida por sus miembros para mostrar una parte de la realidad deseada, puede ser imágenes con eslóganes en el que se enaltezca la figura de líderes; éxitos del grupo; objetivos utópicos e ideales que presente el grupo, etc.
  2. Captación de nuevos adeptos: Tanto en su fase inicial de crecimiento, como en una fase más madura en la que se producen pérdidas de miembros, ya sea por detenciones o fallecimientos, la organización terrorista necesita un fluir constante de nuevos miembros que engruesen sus filas, sin éste, la organización está abocada al fracaso. Las personas receptoras son personas que tienen algún tipo de afinidad, relación o simpatía con la ideología/religión del grupo, en muchos casos, de su entorno social ( La propaganda aquí tendría una gran utilidad en la parte de la legitimación de la violencia, dado que aunque una persona pueda estar de acuerdo con los objetivos de la organización, no así en el empleo de la violencia como medio para alcanzar sus objetivos. La propaganda contenida para esta función podrían ser aquellos abusos, crímenes, censuras, ataques, etc. cometidos por los que se consideran “enemigos”. Los crímenes de guerra, las injusticias, la violación de los derechos básicos son siempre una fuente de odio y rencor que llevan a deseos de venganza y reinstauración de una justicia por cualquier medio, que será empleada por estos grupos para llevar a los nuevos individuos a una retórica indispensable a la hora de cometer un acto violento. La finalidad de esos elementos no es otra que una respuesta emocional del receptor a la vez que se ofrece una solución o propuesta para eliminar esa “disonancia cognitiva”, la lucha y la venganza.
  1. Aterrorizar a la población enemiga y minar la confianza que esta deposita en sus gobernantes: El terrorismo es al fin y al cabo, el empleo del terror y el miedo en el objetivo y en la sociedad en general, en la que trata de crear una serie de inseguridades y ansiedad usando amenazas y coacciones. La propaganda es otro instrumento más para la desmoralización del adversario, que mediante esas amenazas tienen como fin alterar la normalidad social e introducir el temor de una población que se ve indefensa ante la amenaza terrorista. Se da aquí una relación bidireccional, dado que la violencia y el miedo no vale sin un una propaganda de difusión, ni la propaganda y las amenazas tienen sentido si no hay una violencia detrás.
  2. Generar simpatía y apoyo entre su base social: Además de entre sus propias filas de militantes, el grupo tratará a toda costa de mejorar la imagen de la organización y ampliar el respaldo entre la población. Aquí se encuentra propaganda de todo tipo, la de mitificación de los líderes de la organización, que venderán una imagen positiva de sí mismos; la de victorias y éxitos del grupo, exagerándolas y dándoles un áurea heroicidad y exaltación del valor, compañerismo, etc. ; legitimación de los objetivos, presentándolos como ideales, exageradamente beneficiosos para la población, e incluso utópicos. El motivo de esta finalidad es que sin el apoyo fuerte de la sociedad, el grupo no puede sobrevivir a largo plazo (aislamiento, falta de nuevos miembros, visión negativa del grupo, marginalidad, entorno hostil, etc.).Otros autores, tienen otras clasificaciones, como De la Corte Ibáñez (2006) que plantea que las funciones de la ideología terrorista se pueden agrupar en dos categorías principales: Psicológica y estratégica. La primera, la psicológica incluye:
  1. Función motivadora: tienen unas metas, que creen justas, los terroristas se sienten justificados moralmente.
  2. Función cognitiva: tienen una definición crítica o perversa de la sociedad y del mundo, de las instituciones y de los adversarios. Estas definiciones sería a través de las cuales los terroristas interpretan la realidad. “Los terroristas han adquirido un conjunto de ideas, pensamientos, sentimientos, creencias, etc. que les hace percibir el mundo con grandes distorsiones. Son sus distorsiones, y no la realidad, lo que les lleva a actuar como lo hacen. (Bar-Tal 2000);
  3. Función identitaria: para poder constituir un marco de creencias compartidas por el grupo y reconocerse entre sí como luchadores por una misma causa. El desarrollo de esta sólida identidad colectiva de los terroristas fortalece su adhesión al movimiento u organización. En cuanto a las funciones estratégicas, se refieren a los efectos que favorecen el correcto funcionamiento de las campañas terroristas y la continuidad de la organización terrorista.
  1. Función orientadora: Precisando los objetivos inmediatos y finales en vista a los cuales deben planificarse los atentados, ayudando a seleccionar sus potenciales blancos o víctimas mediante la identificación de adversarios o enemigos y especificando qué métodos valen para realizar los atentados.
  2. Función coactiva: Amenazando a los adversarios del grupo, para así poder dar publicidad a la causa.
  3. Función legitimadora: La principal función de la propaganda y la ideología terrorista es la de legitimar las actividades del grupo, que en este caso es de vital importancia, dado que implican la violencia.

La propaganda tiene como objetivo a las masas, un conjunto enorme de individuos, y por lo tanto no todos responderán de la misma forma, existen factores personales, vivenciales, psicológicos, biológicos, psicopatológicos, etc. que pueden hacer que los efectos de la propaganda sean total y radicalmente distintos de una persona a otra. A continuación expondré los mecanismos psicológicos implicados en la propaganda terrorista, es decir, aquellos que se trata de inculcar en el receptor:

Distorsión de la realidad o distorsión cognitiva: Se entiende por ésta como una visión irreal y falsa de los acontecimientos ocurridos, de los elementos implicados en el conflicto, de las personas implicadas, etc. por ejemplo dando una visión falsa y más positiva tanto de la organización como de sus integrantes y atribuirles características deseables.

Compromiso total de los militantes: Será la lealtad de los miembros de la organización criminal un punto clave a conseguir.

Ideologización: Se refiere a la plena y definitiva interiorización de la ideología organizacional. Una vez ocurrida esta, además se produce un efecto de reafirmación, en donde la información nueva pasa por el filtro de la si se adecua  o no al esquema de la ideología. Se produce así una tendencia a aceptar como más creíble o cierto la información que reafirma la ideología propia y a rechazar aquella información que no encaja o le es contraria.

Despersonalización: Este concepto proviene de la teoría de la identidad social, que consiste en un proceso de tipo psicológico que hace que bajo ciertas condiciones los individuos se perciban a sí mismo como miembros semejantes o intercambiables de un determinado colectivo, en vez de verse a sí mismo como personas individuales y únicas.

La categorización: La categorización se basa en la reconceptualización cognitiva del grupo social, es decir, el grupo es una colección de individuos que se perciben a sí mismos como miembros de la misma categoría social.

Cohesión o interdependencia: Dependencia mutua para alcanzar metas comunes que es lo que da lugar a una estructura basada en las relaciones de rol y reglas compartidas.. También lo será la asimilación de las metas del grupo y la formación de heteroestereotipos negativos de aquellos objetivos de la organización terrorista y autoestereotipos positivos del propio grupo. (Henri Tajfel 1984)

Endogrupo-Exogrupo: Una de las consecuencias tanto de la propaganda como de la ideología y del discurso terrorista es tratar de aumentar todo lo posible la separación entre lo que consideran el endogrupo, o grupo propio, y el exogrupo, todo lo que lo rodea y le es ajeno, pero especialmente aquello externo a lo que se enfrentan e identifican con el adversario o enemigo. La formación de esta división dual se traduce en una transformación de la percepción de la realidad sesgada y subjetivista donde progresivamente se van a adoptando visiones más positivas del endogrupo y más negativas del exogrupo, asi como otros efectos como la formación de estereotipos, la etiquetación de individuos, estigmatización y psicologización del adversario, la preferencia por la compañía e intimidad con miembros del endogrupo frente al entorno externo, la ruptura y aislamiento del entorno previo a la entrada del grupo, etc.

Torres Soriano (2009), realiza una recopilación realmente interesante de las técnicas propagandísticas en el caso del Yihadismo. Este autor elabora un listado de las más comunes:

  1. La búsqueda de la frustración: La frustración (hambre, injusticia, falta de seguridad) facilita la sugestión y la facilidad para ser influenciado (Brown, 1986), pero la frustración es un estado subjetivo, por lo que los grupos terroristas trataran de crear ese estado de frustración aunque no se den las circunstancias realmente.
  2. Redefinir la identidad del individuo: Cuando el individuo forma parte de la multitud, es más débil y fácil de influir, acepta el nuevo sistema de valores y creencias al redefinir su personalidad.
  3. Evitar visiones alternativas: No se debe dejar ningún hueco por visiones alternativas a las de la propaganda. Se trata de abarcar todos los aspectos de la experiencia vital del individuo. Se trata por lo tanto, de ser el único punto de referencia para entender el mundo que le rodea, y es ahí donde se elimina la las fuentes alternativas de información.
  4. Incidir sobre los componentes irracionales del pensamiento: Si prima lo irracional, es más fácil aceptar las creencias que se ajusten a los valores irracionales del terrorismo.
  5. Uso de la mentira: Para colocar al adversario en una posición negativa o de debilidad cambiando la representación de la realidad.
  1. Deshumanización del enemigo: En la propaganda yihadista se trata de vincular a sus enemigos con aquellos atributos que consideran negativos, pero también de eliminar los rasgos que les dan humanidad.
  1. Creación de personalidades carismáticas: La credibilidad de la fuente es de una gran relevancia en la comunicación persuasiva, siempre se han empleado imágenes carismáticas y de liderazgo tanto en la propaganda de guerra como en la política. Las personas que son admiradas y resultan atrayentes aportan credibilidad al mensaje y no se les atribuyen intereses ocultos.
  1. Simplificación de la realidad: Tratar de explotar la falta de esfuerzo intelectual argumentando en los términos más simples aun a pesar de que sean problemas complejos.
  1. Provocar un malestar movilizador: Aquí se encuadra la teoría de la disonancia cognitiva (Festinger, L.1957) en la que se afirma que cuando una persona tiene dos cogniciones (ideas, creencias) contrarias e incongruentes se produce un efecto de ansiedad para la persona, por lo que trata de racionalizar el conflicto entre las mismas para variar una de las cogniciones de forma que puedan encajar.
  1. El efecto del ganador: Dar la imagen de que son los vencedores, y el individuo está en una situación de marginalidad de donde tiene que salir agrupándose en la organización.
  1. Explotación Propagandística de la brutalidad (los vídeos de decapitaciones): El movimiento yihadista en generar ha seguido a Al Qaeda en la campaña de degollamiento que comenzó esta con el degollamiento de periodistas. Esta práctica tiene su sentido en que ésta práctica brutal tiene un fuerte y potente impacto en la opinión pública, que gracias a su interés mediático, retransmite esta práctica aterrorizando a la población enemiga.

Los medios son aquellas vías de comunicación por las que pueden fluir los mensajes de un emisor hasta llegar al receptor de dicho mensaje. En sus orígenes, la propaganda tradicional empleaba preferentemente carteles con eslóganes e imágenes en color, como por ejemplo los carteles bélicos  de la 1ª y 2ª GM, pero la verdadera propaganda fue la que vino de mano del cine. Los distintos Estados implicados en la 2ª GM emplearon el cine y las películas para engrandecer y legitimar la causa propia, dar una sensación de victoria, transmitir una visión heroica y positiva del propio bando, mientras que se formaba una visión negativa del contrario, con todos los atributos que sean posibles para tratar de implantar el odio y el miedo hacia el enemigo.

Con la llegada de la televisión, la propaganda encuentra un medio ideal para encauzar la propaganda ya que permite un formato tanto gráfico como de audio.

La Radio fue otro medio para propagar la propaganda, emitiendo mensajes tanto para motivar y dar ánimos a la nación (anécdotas heroicas, canciones y eslóganes) como para desacreditar y dañar la imagen del contrincante, contando los crímenes de guerra perpetrados por el enemigo, la falta de legitimidad del mismo, o atribuyéndolas características indeseables o negativas.

Los panfletos o boletines eran otro medio ideal, sobre todo muy utilizado por grupos de izquierdas (anarquistas, marxistas y comunistas) para transmitir su ideología y propaganda, que en aquella época consiguieron llegar a millones de personas haciendo que se convirtiese en una llama en medio de la yesca.

Actualmente, los medio son aún más amplios, por ejemplo en forma de graffitis en las calles, donde se pueden leer eslóganes de todo tipo; Los Vídeos, elemento indispensable desde donde los grupos terroristas se apoyan para transmitir sus mensajes e ideas, empleando todo tipo de elementos persuasivos, por ejemplo, los vídeos de propaganda yihadista donde se ven escaramuzas y ataques contra soldados y blindados norteamericanos; Los carteles con imagen y texto que circulan por las redes sociales, con mensajes simples y directos. La música, en donde se puede introducir letras de carácter político o religioso.

Pero sobre todo, el que se ha convertido en el ideal medio de difusión de propaganda es Internet, en donde se pueden encontrar cualquiera de los medios anteriores. Internet, como red amplia y abierta de información, es un lugar que en primer lugar proporciona un cierto anonimato (cada día menos), pero que sobre todo, permite difundir todo tipo de información y en distintos formatos: Vídeo, audio, imagen y texto. Los grupos terroristas se adaptan a las nuevas formas de comunicación, emplean las redes sociales como Facebook y Twitter, cuelgan vídeos en Facebook, otros, como el ISIS hacen campañas para que seguidores suyos saquen fotos con símbolos del estado islámico en lugares emblemáticos. En una entrevista a el Coronel y experto en geopolítica, Pedro Baños Bajo (2016), habla de la efectiva y actualizada propaganda del Estado Islámico y cómo ha sabido adaptarse a la nueva sociedad del siglo XIX:

Los medios de comunicación en general, son por lo tanto un elemento primordial que deben atender los grupos terroristas, ya que si emplean la estrategia adecuada, pueden aumentar el apoyo social de la población, así como disminuir al del adversario. Todo ello no quiere decir que sean los medios de comunicación los culpables o compinches, sino que son unos colaboradores necesarios sin quererlo, ya que cuando retransmiten imágenes como vídeos, lo que acaban consiguiendo es difundir el terror en la población, el principal objetivo de los terroristas, cuando difunden sus comunicados persuasivos, llegan a la población provocando el efecto deseado por ellos, cuando difunden informaciones falsas, consiguen engañar a la gente, etc. Tampoco es, obviamente, la difusión de propaganda y mensajes terroristas la finalidad de las redes sociales, no obstante, es uno de los medios que van a emplear para difundir bulos y mensajes, carteles con imagen y eslogan, noticias de medios afines con tergiversaciones en los hechos reales, etc.

En “La lógica del terrorismo”, De la Corte Ibáñez (2006) enumera una lista muy interesante de funciones que lo medios de comunicación de masas pueden desempeñar en favor de los terroristas:

Revelar la autoría de los atentados; Transmitir y difundir amenazas; Hacer declaraciones, ofertas de tregua o diálogos; Difundir rumores o bulos; Demostrar la capacidad de acción a los adversarios; Difundir la propia ideología y objetivos para captación; Adquirir información útil para la omisión de nuevos atentados; Obtener información sobre las reacciones públicas a los atentados; Denunciar y distorsionar las medidas antiterroristas; Estimular las acciones terroristas por parte de otras células pertenecientes a la propia organización.

Estado Islámico de Irak y el Levante- Daesh

El estado islámico tiene una gran parte de su campaña propagandística a divulgar el terror en todas sus formas, muestra con todo el alarde del mundo sus atentados, en la mayoría de casos mediante vídeos en los que se puede ver asaltos a vehículos, ejecuciones, etc. Pero lo que destaca en gran medida es el enorme avance técnico de la grabación, montaje y edición de los vídeos, que son de alta calidad, con un gran número de planos (incluso el empleo de drones para planos aéreos) mucho más elaborados que los de los grupos terroristas comunes, empleo de cámara lenta, introducciones en 3D, etc. Todo ello, les permite conectar mejor con unas nuevas generaciones de jóvenes acostumbrados a los avances del mundo audiovisual y las TIC, así como la comunidad islámica.

HAMAS, Movimiento de Resistencia Islámica

 La maquinaria propagandística durante años se ha desplegado tanto en palestina como en el mundo árabe y musulmán dado infinidad de mítines, emitido comunicados, ingeniado eslóganes, grabado y editado vídeos, elaborado carteles, graffitis, canciones, etc. pero también les ha sido de gran ayuda en sus campañas propagandísticas y de comunicación el uso de los “Mártires por la causa”, personas que son expuestas como héroes que han muerto por la causa palestina. Además de la propaganda de captación, Hamas se ha hecho mundialmente conocida por sus famosos cohetes, que han sembrado el pánico en el sur de Israel. El cohete es un elemento muy común en la propaganda de Hamas ya que simboliza la continuidad de la lucha.

Otro recurso propagandístico de Hamas, son los secuestros de soldados y ciudadanos Israelies, ya que son como un “trofeo” en manos de los palestinos para poder dar fuerza a sus filas, así como dar una imagen de debilidad al adversario, inculcar sensaciones de inseguridad. Además de estas formas de propaganda, Hamas ha empleado siempre la técnica del liderazgo y las imágenes carismáticas, como son la del Yasser Arafat, el jeque Ahmed Yassín, o la de Leila Khaled (de la OLP), primera mujer en secuestrar un avión en el año 1969.

AL-QAEDA

En sus inicios, la propaganda de Al Qaeda era dirigida contra lo que consideraban la conspiración sionista, orquestada por “judíos y cruzados”, que tenía su expresión más cercana en la invasión de Afganistán por los soviéticos, por lo que así inicia una campaña en la que incluso los EEUU se involucran. Al Qaeda crea en 1984 la “oficina de servicios” su proyecto es una revista, al Jihad. Hace constantes publicaciones sobre la guerra de Afganistán. Inicialmente era un a producción en blanco y negro pero posteriormente mejoraría en calidad. La revista demostró ser de vital importancia para la captación de nuevos miembros para luchar contra los soviéticos. Posteriormente, además del formato escrito, Al Qaeda se moderniza y pasa a otro tipos de formatos, como el vídeo y audio:

 “La producción mediática de Al Qaeda ha sido constante, desde los atentados del 11-S, distribuyen docenas de cinta de vídeo y audio, una media de una cada seis semanas”.  Torres Soriano, M. (2009)

Aunque Al Qaeda tenga su medio de expresión propagandística en varios formatos, es mediante la violencia y los atentados, la forma en la que mejor divulgará su mensaje y conseguirá la publicidad que tanto ansía. El atentado del 11 de Septiembre se convierte en el mayor caso de “propaganda por el hecho” ya que es ese atentado lo que lo catapulta hacia la “fama” llegando a los televisores y periódicos de todo el mundo, convirtiéndose la imagen de su líder, Osama Bin Laden, en el uno de los rostros más reconocidos, así como el hombre más buscado del mundo.

IRA

La propaganda de la organización se dirige a alcanzar varias finalidades. Por un lado, común a la de otras organizaciones, a la de hacer campaña en favor de la lucha armada y violenta, el uso de las armas y tratar de mejorar en la medida de lo posible la visión del “romanticismo” de la lucha revolucionaria de un grupo de “resistencia” contra un “enemigo opresor que invade y asfixia al pueblo”. Para ello, son comunes elementos gráficos como personas de paisano empuñando un arma, imágenes de soldados portando fusiles de diverso tipo, eslóganes que preguntan al receptor del mensaje el motivo por el cual no se ha unido ya, etc.

En segundo lugar, nos encontramos con la propaganda dirigida a legitimar los objetivos o metas de la organización, es decir,  la salida inmediata de las tropas británicas y la unificación de Irlanda.

La tercera finalidad es la de deslegitimar al enemigo, tratando de perjudicar en la medida de posible al Reino Unido, destacando en la medida de lo posible la situación de “ocupación” militar a la que se ve sometida el territorio y la población, los abusos de la autoridad, la represión de las protestas, el control social al que se ve sometido el pueblo, etc.

Algunos medios persuasivos que ha empleado el IRA han sido algunos sucesos o circunstancias que ha sabido aprovechar para dar fuerza a su causa, como son por ejemplo el Bloody Sunday, o Domingo Sangriento, en el que el ejército británico dispersó una manifestación en la ciudad de Derry empleando la fuerza, disparando ráfagas de ametralladora contra la gente allí congregada (nortedeirlanda.blogspot 2010).

Un elemento que también ha sido muy fortalecedor para la causa del IRA, han sido “las huelgas de hambre de 1981”. Comenzaron el 1 de marzo y acabaron el 3 de octubre, previamente, ya se habían dado unas previas por un grupo de 7 miembros:

ETA

La propaganda es extensa, empleando diversos formatos como Fotografías, Graffitis, Vídeos, Panfletos, Folletos, etc. e incluso usando otros métodos de captación como cursos y actividades organizadas para gente joven con el fin de ir allanando el camino en ganarse su simpatía. También son recurrentes las imágenes de la policía agrediendo a personas mayores, con minusvalías, jóvenes, o incluso fotografías sacadas de contexto con la intención de crear un impacto emocional negativo en el receptor. Por otro lado, también ha sido muy empleada la campaña de denuncia de torturas, donde innumerables testimonios sobre torturas de encarcelados y detenidos, con todo lujo de detalles, describían abusos sexuales, daños físicos, vejaciones, etc.

Los líderes, así como encarcelados (“presos políticos”), portavoces, miembros del aparato político, etc. son un recurso frecuente en la propaganda, tanto a pie de calle como en las herrikotabernas, donde hace unos años se llegó a ilegalizar la exposición pública de fotografías de miembros de la banda armada.

La propaganda por el hecho también ha sido un punto fuerte en la propaganda etarra, siendo el atentado mediante la colocación de explosivos el arma preferida de la organización criminal. El impacto tanto mediático como emocional es enorme, por lo que han sabido aprovecharlo para crear un impacto psicológico de miedo, así como de acompañarlo de amenazas para poder obtener recursos económicos (amenazas exigiendo el impuesto revolucionario), que de otra forma carecería de cualquier credibilidad o efecto coaccionador.

Terrorismo

La utilización de una violencia organizada y estable en el tiempo, intensa pero variable, para condicionar la distribución del poder político dentro de una sociedad”. Destacando unos elementos centrales: El uso o amenaza de usar la violencia, la motivación política, y la creación de una presión psicológica mediante el terror. (Sánchez Herrero, N. 2013)

Propaganda

La propaganda es el uso sistemático más o menos deliberadamente planeado de símbolos,principalmente mediante sugestión y técnicas psicológicas similares,con la intención de alterar y controlar opiniones, ideas, valores y,en última instancia, cambiar acciones públicas con arreglo a unas líneas predeterminadas. Se mueven en una estructura determinada sin la cual no pueden comprenderse sus aspectos psicológicos y culturales” (Brown, 1991). Otra definición podría ser la aportada por Jowett y O´Donell: La propaganda es “el deliberado y sistemático intento de dar forma a las percepciones, manipular el conocimiento y la conducta directa, para conseguir una respuesta que sobrepase la intención deseada del propagandista”Jowett y O´Donell (1992)

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