Aunque estos tipos de medios hayan perseguido desde sus inicios como propósito principal el anonimato y privacidad de los usuarios, muchos criminales aprovechan las ventajas que les proporcionan dichos medios para delinquir, debido a la dificultad que supone rastrearlos y localizarlos en este tipo de medios.
A continuación se nombran algunos de los delitos más comunes que se dan en dichos medios:
Tráfico de drogas.
A través de diferentes lugares de venta llamados market place, en los que se puede encontrar prácticamente de todo, aunque uno de los productos estrella es la droga. Los vendedores y compradores de drogas han encontrado en este tipo de medio el lugar perfecto para distribuir y comprar este tipo de sustancias. Al más puro estilo de plataformas como Ebay, diferentes market place ofrecen una gran variedad de sustancias y estupefacientes ilícitos, divididas por categorías: esteroides, disociativos, estimulantes, etc. Drogas como cocaína, burundanga o hachís figuran entre los muchos productos disponibles. Aunque también medicación como oxidocona o xanax se ofertan en este tipo de portales. Y no sólo sustancias, también se venden materias primas y utensilios para el abastecimiento de los productores de drogas.
Uno de los mercados más populares fue Silk Road, que aunque se desmanteló su versión 2.0 en 2013 con la detención de su creador, otros mercados han seguido su estela y se han hecho con sus clientes y vendedores. Cabe decir que Silk Road resurgió a principios del presente año con su versión 3.0.
Si bien es cierto que este tipo de sitios web cambian y desaparecen a menudo, existen páginas que recogen y actualizan los diferentes market place disponibles, actualizandolas con bastante frecuencia. Además, muchos de estos sitios web han establecido un sistema por invitación, de manera que necesitas una para poder acceder a los servicios que ofrecen y realizar transacciones en dicho sitio, de esta manera pueden llevar cierto control y publicitarse solo en aquellos sitios que consideren seguros para sí mismos.
Pedofilia y pornografía infantil.
Antes de Internet, el intercambio o la recopilación de imágenes de niños desnudos seguramente era una tarea bastante difícil y peligrosa para pederastas y pedófilos, pero con el auge de Internet, la evolución y servicios que ofrecen ciertos medios de acceso a la red como la darknet, Internet se ha convertido en un lugar de fácil y rápido acceso a contenidos de este tipo.
En concreto, la darknet debido al carácter anónimo que presenta, se convierte en el foro ideal para la pederastia, en el que criminales de todo el mundo pueden compartir su material bajo diferentes sobrenombres, como por ejemplo “hard candy”.
Venta ilegal de armas.
Al igual que el tráfico de drogas, el negocio de venta ilegal de armas, ha encontrado una gran plataforma de venta en la darknet. De nuevo, el anonimato del medio proporciona un plus para la venta, en este caso la venta ilegal de armas.
Muchos de los market place mencionados para la venta y tráfico de drogas, también ofrecen productos para los compradores y vendedores de este mercado ilegal.
La amplia variedad de armas que se ofrecen en estos mercados es cuanto menos sorprendente. Desde pistolas, fusiles o granadas hasta diseños para impresoras 3D de pistolas.
Sicarios.
Los asesinos a sueldo encuentran en la darknet un medio perfecto donde publicitarse y ofrecer sus servicios.
Los precios de este tipo de servicios varían en función de diferentes variables. Las cuales pueden ser desde el país de residencia (tanto del sicario como del objetivo), costes de desplazamiento, la importancia del objetivo o futura víctima (figuras públicas, políticos o empresarios importantes), el tiempo para la realización del trabajo, la edad del objetivo, etc.
Algunos ofrecen servicios extras, como por ejemplo el envío de una foto del cadáver al contratante del servicio. Servicios extras que por supuesto hay que sumar al precio del servicio.
Otros incluso tienen algunas excepciones como no matar a menores de 16 años o políticos de altos cargos.
Si bien es cierto que también se encuentra mucho farsante entre los anunciantes de este servicio, tampoco es difícil encontrar uno si se necesita. Algunos trabajan por separado y otros en grupo.
Venta de pasaportes falsos y falsificaciones.
Conseguir un pasaporte falso en la darknet no es difícil, pero tampoco es barato. Los precios varían, dependiendo del país del que se quiera el pasaporte. Muchas veces depende también de cómo de buena tenga que ser la falsificación, en función de los detectores que tenga cada país para su detección, para que parezca original.
Además de los pasaportes también se ofrecen falsificaciones como pueden ser carnés de conducir o incluso dinero.
Localización, acoso y extorsión.
En estos medios hackers ofrecen sus servicios para localizar a personas, ya sea a través de su teléfono móvil o a través de otros medios.
Esta localización puede ser utilizada para diferentes fines que se podrían catalogar si bien no como benignos tampoco como los peores, como puede ser localizar a algún vendedor que protagonizó algún timo o algún pariente. Pero también puede ser realmente peligroso, como por ejemplo puede ser la de una víctima de maltrato buscada por su expareja.
El cyberstalking, se trata del uso de Internet u otra tecnología de comunicación para hostigar, perseguir o amenazar a alguien (Basu y Jones, 2007). Por lo que ni que decir tiene, que gracias de nuevo al anonimato, se encuentra en estos medios la forma perfecta para que los cyberstalkers realicen sus actividades de persecución y amenaza contra sus víctimas, sin temor a las represalias.
Respecto a los menores, a parte de los ya mencionados, se dan además otros tipos de delitos relacionados con el ciberacoso. Como es el caso del cyberbullying, el cual también aprovecha las ventajas de anonimato que le ofrecen estos medios. Pues se trata de un tipo de acoso online, y una de las formas más comunes de agresión entre menores. Otro fenómeno relacionado con menores que se da en este tipo de medios es el online grooming, en el que los pederastas y pedófilos contactan con víctimas (menores de edad) y mantienen comunicación con ellas a través de chats, fingiendo ser una persona cercana y con inquietudes afines, ganándose así su confianza. Una vez conseguida, le solicitan que le envíen fotografías o vídeos de ellos desnudos, para más tarde y una vez conseguido el material explícito, chantajearlos con la difusión de dicho material para que accedan a sus peticiones. Hay que añadir que este tipo de comportamientos se dan sin necesidad de utilizar medios como darknet, principalmente porque las víctimas no suelen tener este tipo de conocimientos informáticos como para acceder a la darknet por medio de navegadores especiales.
Terrorismo.
Grupos terroristas, especialmente yihadistas, utilizan estos medios para congregar y comunicarse con sus militantes.
Sitios dedicados a la divulgación de la ideología yihadista, o incitando a alistarse al ejército para lo que ellos mismos denominan como la guerra santa, se alojan en la darknet. Incluso recaudan fondos mediante el uso de bitcoins. Existen sitios web que piden donaciones para su causa, y además enseña a los militantes y simpatizantes a comprar armas para la yihad en Darknet.
Estas organizaciones terroristas, como por ejemplo Al qaeda o el ISIS, suelen tener una web a modo de señuelo, alojada normalmente en la web superficial, y que contienen material sin importancia de divulgación y llamamiento a la ideología que defienden. Esta táctica es utilizada para que las fuerzas de seguridad crean que esas son sus páginas de difusión reales, mientras que las organizaciones operan en otras situadas en Darknet, evitando o al menos intentando evitar que las autoridades lleguen hasta sus sitios web de importancia.
Hacktivismo.
Si los criminales encuentran perfectos este tipo de medios para delinquir, sin duda, los que están en lo que se podría decir en su hábitat natural son los denominados hackers.
Este tipo de delincuentes se reúnen en diferentes organizaciones para operar en grupo. Muchos de ellos bien conocidos, como por ejemplo Anonymous. Se supone que su filosofía es siempre la de hacer el bien o lo correcto según su moral, el problema reside en que no siempre lo que se califique como correcto sea legal.
Casos como el de WikiLeaks, que destapó documentación del estado norteamericano, o como la violación masiva de datos de Sony, publicando los datos de las cuentas de muchos usuarios de Playstation, han sido de los que más repercusión han causado en los medios de comunicación y en la opinión pública.
La comunicación entre los integrantes de estos grupos u otros hackers se suele dar en foros en los que sólo se puede acceder por invitación.
Malware.
Se trata de programas maliciosos, instalados normalmente sin el consentimiento o al menos sin que el usuario sea consciente realmente de lo que está instalando en su equipo.
El uso de las botnets unido al malware, en este tipo de medios en los que se goza de cierto nivel de privacidad y sobre todo, anonimato, ha crecido mucho con respecto a los situados en la web superficial.
Aprovechando las posibilidades de anonimato que ofrece la red Tor, cualquier tráfico generado por el malware que intente ser analizado y capturado por autoridades o investigadores, resultará complicado de rastrear para capturar a los ciberdelincuentes.
Y ya no sólo los PCs o móviles son susceptibles de este tipo de ataques, si no que prácticamente cualquier dispositivo con conexión a Internet, es susceptible de ser contaminado o contagiado por algún tipo de malware.
Un tipo de malware bastante utilizado en los últimos años es el conocido como ransomware, este software malicioso infecta un determinado PC elegido por el ciberdelincuente y le da la capacidad a éste de bloquearlo desde una ubicación remota e incluso encriptar los archivos quitándole el control de toda la información y datos almacenados al usuario, al que normalmente el delincuente devolverá el control e información requisada siempre a cambio de una cantidad monetaria estimada por el ciberdelincuente.
Piratería.
La descarga de contenidos siempre ha sido uno de los estandartes de la darknet, de hecho anteriormente la definición de dicho término se relacionaba estrechamente con el intercambio y distribución de materiales y contenidos protegidos por derechos de autor y distribución (copyright). En la actualidad las leyes de la mayoría de los países se han endurecido para perseguir las descargas ilegales y la piratería en la red, por lo que los contenidos que eran tan fáciles de encontrar en la Web superficial antes, ahora es necesario buscarlos en sitios más recónditos alojados en la web profunda e incluso en la darknet. Pudiéndose encontrar un mundo lleno de contenidos disponibles para su posterior descarga ilegal. Desde libros, películas o música a software o programas de pago. A través de aplicaciones de descarga o de servidores destinados a ello.
Revelación de documentación secreta y/o confidencial.
El robo y posterior revelación de información confidencial y secreta a diferentes gobiernos y empresas por parte de varios grupos de hackers ha sido uno de los motivos de la creciente popularidad de estos medios, especialmente de la darknet.
Casos, como por ejemplo el de Wikileaks (nombrado anteriormente) o el caso Snowden, en el que un antiguo consultor e informante de la CIA y NSA, desveló información secreta a través de diferentes periódicos de documentos clasificados como alto secreto sobre varios programas de las organizaciones con las que trabajó y colaboró.
Otros caso es el también antes enunciado robo de datos de la empresa Sony, en el que muchos usuarios vieron cómo los datos de sus cuentas de PlayStation eran publicadas en Internet.
A parte de los delitos nombrados, existen otros como por ejemplo las películas denominadas “snuff”, en las cuales se filman violaciones, torturas, suicidios o asesinatos, entre otros. También, aunque en menor medida, circula otro tipo de material que podría calificarse como poco de excéntrico, como vídeos de carácter escatológico o incluso “crush fetish”, en las cuales se puede ver el maltrato y asesinato de animales aplastándolos.