El motivo de la génesis de una banda se ve influenciado y condicionado por infinidad de procesos sociales que afectan y producen la interacción de los jóvenes. Sin embargo, aun asimilando la existencia de esta multitud de factores, se pueden establecer ciertos ítems de naturaleza genérica que nos permitan ilustrar el origen y formación de las bandas latinas.
Para poder establecer el nacimiento del concepto banda debemos remontarnos a principios del siglo XX en los Estados Unidos donde grupos de amigos del barrio compartían aficiones comunes que les llevaban a enfrentarse con otros grupos rivales cuando sus objetivos se cruzaban (Moore, 1991).
Actualmente los estudios realizados en el continente americano revelan seis detonantes de la creación de bandas (Thrasher, 1963):
- Grupos formados por amigos enfrentados con otros grupos de iguales (Huff, 2004).
- Grupos de baile enfrentados por la competencia entre ellos (Hagedron, 1998).
- Grupos de música que pueden generar conflictos con grupos rivales y desembocar en bandas cuando adoptan conductas antisociales (Padilla, 1996).
- Grupos generados en el seno de las prisiones con la finalidad de protegerse de otros reclusos (Brotherton & Barrios, 2004).
- Grupos exportados desde sus países de origen mediante la migración de miembros de bandas y la creación de nuevas en sus países de acogida (Huff, 2004).
- Grupos derivados del deporte generados a partir de la hostilidad existente entre aficiones (Decker, & Van Winkle, 1996).
En el caso que nos atañe la existencia de bandas latinas en territorio español respondería al supuesto quinto ya que, en la mayoría de los casos, responde a los flujos migratorios que han acontecido en las últimas dos décadas procedentes de Sudamérica. Aunque este proceso se diferencia del americano al tratarse de jóvenes inmigrantes llegados a su país de acogida sin la idea de formar ninguna banda. Serán las nuevas condiciones sociales, culturales y laborales que condicionarán su agrupamiento y el nacimiento de estas bandas.
La mayoría de estos jóvenes portan interiorizados determinados esquemas de comportamiento grupal observados en sus países de origen. En su llegada al nuevo país las circunstancias (carencia de los padres, separación de sus amistades, nuevas costumbres, integración escolar, etc.) a las cuales deben hacer frente pueden ocasionar que se agrupen entre ellos buscando rellenar la parcela sentimental y afectiva vacía en sus vidas (Kazyrytski, 2008).
Tipologías
Las relaciones que se pueden generar en el seno de una banda, así como las generadas desde esta hacia su entorno, sumado a las características de los miembros que las integran y de los países de origen de las mismas, nos muestra una tipología de bandas que, a rasgos generales, pueden ser aplicadas a la inmensa mayoría de bandas. Esta topología se centra en cinco grupos (Klein & Maxson, 2006):
- Banda tradicional: Formada por numerosos integrantes y con más de 20 años de existencia, con integrantes de diversas edades incluso generaciones. Sus miembros se identifican con un determinado territorio. Se caracteriza por una delincuencia polifacética
- Banda neotradicional: La existencia de la misma no acostumbra a superar los 10 años y acostumbra a estar integrada por más de 50 miembros. Se caracteriza por una delincuencia polifacética.
- Banda comprimida: Integrada por menos de 50 miembros sin grandes diferencias de edad entre ellos. No se asocian a un determinado territorio y su vida operativa no acostumbra a superar los 10 años. Cometen una amplia gama de delitos.
- Banda colectiva: Banda más numerosa que la anterior (entre 50 y 100 miembros) donde se aprecia diferencia de edades entre sus miembros y donde no muestran un apego especial a un territorio. Comenten una delincuencia polifacética.
- Banda especializada: Especializados en un tipo de delito. Grupo de escasos miembros no superior a 50 personas. Es una tipología de banda territorial donde sus miembros se aproximan en edad y su existencia no acostumbra a superar los 10 años.
La diversidad de bandas latinas existentes ocasiona que, mientras algunas de ellas puedan pertenecer a una determinada tipología de las arriba expuestas, otras pueden ajustarse, a razón de sus características, en otra de las modalidades expuestas.
De entre la diversidad de bandas latinas existentes, tanto a nivel nacional como internacional, debemos destacar de entre el grueso aquellas que por su relevancia mediática o bien por el elevado número de miembros que integran sus filas debemos subrayar por encima del resto. De entre este basto abanico destacamos cinco:
1.- Latin King
La banda latina Latín Kings encuentra su origen en la década de los años 40 en las prisiones de Chicago (Estados Unidos). En 1986, Luis Felipe, un cubano exiliado creo el grupo en la ciudad de Nueva York mientras cumplía condena en una de sus prisiones.
Los Latín Kings tienen una estructura fuertemente estratificada. La estructura del grupo se divide en tres niveles: la denominada Corona Suprema, la Corona Ejecutiva, el Presidente Local y los miembros de la banda. En el argot del grupo se denomina “Inca” al que ostenta la Corona Suprema, la Corona Ejecutiva corresponde a los denominados caciques o señores de la guerra, los jefes locales son denominados Royal Crowns y por último los integrantes de la banda son los Soldados. En el aspecto territorial la unidad básica se denomina Capítulo (Rodríguez Álamo, 2005).
2.- Ñetas
Fundada como una asociación latina en 1979 cuyo objetivo era defender los derechos de los presos internos en la prisión de Oso Blanco (Puerto Rico). El fundador de la asociación fue Carlos Torres Irriarte, conocido como “La Sombra”, murió asesinado el 30 de marzo de 1981, presuntamente a manos de Ayala, fundador de Los 27, quien fue a su vez asesinado el 30 de septiembre del mismo año.
Sus colores son comúnmente blanco, azul y rojo (colores de la bandera de Puerto Rico) y destaca su estricto código de conducta. Se estima que, de los cerca de 14.000 confinados en las cárceles de Puerto Rico, alrededor de 12.000 están unidos a este grupo.
Destaca en su indumentaria el uso de collares cargados también de simbología. Estas prendas están formadas por corazones / bolas de color blanco, rojo y azul.
Su organización consiste en 4 niveles o corazones: Corazón Mayor (Líder), Corazón Medio (Lugarteniente), Corazón Financiero (Secretario – Encargado finanzas) y Corazón Operativo (Reclutador o Instructor) (Books, 2010).
3.- Dominican Don’t Play
Dominicans Don’t Play (DDP) es una banda dominicana que se fundó en Manhattan, New York, a principios de 1990. Localizados concretamente en los barrios de Brooklyn y del Bronx, también se han expandido por otras ciudades como Miami, Massachusetts, New Jersey, Pennsylvania y también España.
Su integración en la banda podría calificarse de sectaria, con una disciplina interna enorme y con castigos si se incumplen las normas. Una vez dentro deben obedecer ciegamente al líder debiendo pagar cuotas semanales destinadas al mantenimiento del grupo y a la compra de armas.
Respecto a su indumentaria se caracterizan por el uso de collares de color azul y rojo propios de la bandera dominicana y visten ropas anchas tipo “hip hop”.
Los pandilleros de los DDP repiten el perfil de cualquier banda latina. Presumen de su pertenencia al colectivo y nunca actúan solos, sino al abrigo del resto de camaradas (www.hispanismo.org, 2009).
4.- Trinitarios
Trinitario, también conocido como 3ni, es una banda latina de expansión internacional originalmente formada en las cárceles de Nueva York e integrada en su mayoría por reclusos de origen dominicano.
El nombre Trinitarios proviene de las tres principales figuras revolucionarias de la historia de la República Dominicana que encabezaron la independencia de Haití durante el año 1844: Juan Pablo Duarte, Francisco del Rosario Sánchez y Matías Ramón Mella (Justice, 2009).
Fue fundada en 1989 en el seno de las cárceles del estado de Nueva York y posteriormente se organizaron en las calles, en los capítulos de los cinco condados de la ciudad de Nueva York. También en Nueva Jersey, Connecticut, Florida, Illinois, Massachusetts, Carolina del Norte, Ohio, Pensilvania, Alaska, e incluso en España (Pérez, 2014).
Su vestimenta se caracteriza por el uso de pañuelos de color verde junto con collares azules, blanco, rojo y verde lima. Estos colores representan la bandera de República Dominicana.
5.- Mara Salvatrucha
La Mara Salvatrucha nace en los Ángeles (California, E.E.UU.) a finales de la década de los ’60 de manos de un grupo de exguerrilleros salvadoreños pertenecientes al Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) huidos de la guerra civil en su país de origen. Su idea original se basaba en poder hacer frente a las carencias, pobreza, miseria y desempleo que se estaban viviendo en El Salvador en aquellos momentos (Notimex, 2013).
Se caracterizan por el uso del tatuaje considerándolo como elemento identificativo de la banda, destacando entre ellos calaveras, cinco puntos, lágrimas, dos caras de un payaso, cicatrices y quemaduras, tres puntos negros (“La Vida Loca”), M13 o M18, son algunos de los tatuajes empleados por sus miembros.
La banda se organiza de forma jerárquica y militar. Tiene una perfecta estructura piramidal distribuida en células (clicas), maras locales o maras de barrio donde a su vez se organizan por escalafones (Rodríguez, 2005).